Xylem: La compañía que cuida hasta la última gota de agua
Para una ducha de 10 minutos se necesitan, en promedio, 200 litros de agua. Para llevar medio kilo de queso a tu mesa, 2.500 litros, y para un litro de leche, 1.000 litros de agua.
¿La verdad? La primera vez que me enfrenté a este ejercicio de equivalencia no pude dejar de pensar en la llave que gotea en mi casa o en el medio vaso de leche que boté porque no me lo alcancé a tomar en la mañana.
Es que nacimos con el agua. Básicamente no nos cuestionamos su disponibilidad, y nos cuesta ponernos en el escenario real de que sea un bien, a ratos, escaso.
Pero, a riesgo de sonar a lugar común, estamos en un escenario complejo y muchos repiten las razones: el cambio climático, la falta de inversión en infraestructura y el aumento de la población mundial.
Hay varios caminos para solucionar este problema. Administrar mejor su proceso de transporte, usar agua de mar y desalinizarla, o controlar la demanda. Hoy me quiero enfocar en la solución más eficiente en términos económicos y sustentables, la eficiencia en el proceso, también conocido como water management.
Esta es una opción más que atractiva. Especialmente si consideramos que entre un 10% y un 40% del agua que podríamos usar se pierde en el proceso de transporte a través de las cañerías. De hecho, el Banco Mundial calcula que esa pérdida de agua podría disminuir en hasta un 6% el PIB de algunos países para el 2050.
Es debido a esto que les quiero compartir una compañía que está metida de lleno en este mundo, Xylem.
Esta compañía norteamericana está marcando tendencia gracias a la forma en la que ha logrado integrar tecnología a su portafolio de soluciones de manejo de agua.
A través del uso de medidores inteligentes y otros sensores ubicados en matrices y cañerías, son capaces de entregarle información clave a sus clientes. Esto a su vez, les permite optimizar su red y disminuir considerablemente la pérdida de agua, asegurar su calidad y correcto flujo.
Xylem, que es el resultado de una serie de adquisiciones, lleva años en el negocio y, aunque su mercado principal es Estados Unidos, ofrece sus productos en más de 170 países. Chile incluido.
Su mirada global y su historia son, justamente, factores que hacen que esta compañía sea de lo más atractivo que hay hoy en el mercado. Su amplia presencia geográfica les permite desarrollar tecnologías y soluciones que resuelven necesidades locales y, al mismo tiempo, responder frente a urgencias en caso de fallas. Mientras que el histórico track record de sus marcas les da a sus clientes la confiabilidad que buscan. Ambos factores son claves para un sector que necesita ofrecer una operación estable y funcional en todo momento.
Al igual que otras compañías, sus ambiciones no se quedan cortas. Para el 2025 esperan reducir en 3.500 millones de m3 las pérdidas de agua, y que 13.000 millones de m3 sean tratados para su reutilización. Esto, equivale al consumo de agua de 226 millones de personas al año si se calcula pensando en que cada persona al día usa, en promedio, 200 litros para cubrir sus necesidades básicas.
Probablemente esta no sea la solución definitiva para resolver por completo la escasez de agua en ciertos lugares. Pero, soy un convencido de que es un gran paso que va en la dirección correcta.
Por mi lado, hoy me termino mi vaso de leche y cambio la “gomita” de la llave.